Bitcoin ha caído en medio de una fuerte aversión al riesgo por parte de los inversores, lo que ha generado retiros masivos de fondos en el mercado de criptomonedas, además de una significativa disminución de la liquidez global. A medida que la situación se desarrolla, el mercado cripto enfrenta una de sus correcciones más severas en lo que va del año.
La caída de Bitcoin y el contexto actual
A fecha del 16 de noviembre de 2025, el precio de Bitcoin se situaba en torno a los 94.000 dólares, lo que marca una notable caída después de que alcanzó un récord histórico de más de 125.000 dólares a principios de octubre. Durante una semana marcada por la aversion global al riesgo, los inversores aceleraron el retiro de fondos vinculados a criptoactivos, y el precio llegó incluso a tocar los 96.000 dólares antes de estabilizarse, registrando así una baja del 2,8%.
La situación se ha vuelto más crítica tras las liquidaciones masivas que ocurrieron el 10 de octubre, cuando operaciones por más de 19.000 millones de dólares eliminaron más de 1 billón de dólares del valor total del ecosistema cripto, de acuerdo a CoinGecko. Solo en las últimas 24 horas, más de 1.000 millones de dólares en posiciones apalancadas fueron liquidadas, de acuerdo con CoinGlass.
Salidas de capitales en fondos cotizados en bolsa (ETF)
El impacto en el mercado ha sido evidente también en los fondos cotizados en bolsa (ETF) que están vinculados a Bitcoin. El jueves pasado, estos fondos registraron salidas netas de aproximadamente 870 millones de dólares, la segunda mayor retirada diaria desde su lanzamiento. Este escenario resalta el deterioro del apetito inversor en un ambiente de creciente volatilidad y expectativas inciertas sobre la política monetaria de Estados Unidos.
El repunte inicial de las acciones estadounidenses a comienzos de la semana, tras la finalización del cierre del gobierno, se desvaneció rápidamente. Conforme se acerca la publicación de datos económicos clave, el mercado muestra dudas sobre posibles recortes de tasas por parte de la Reserva Federal, lo que impacta negativamente en los activos considerados de mayor riesgo, incluyendo las criptomonedas.
La correlación entre criptoactivos y riesgo macroeconómico
Max Gokhman, subdirector de inversiones de Franklin Templeton Investment Solutions, indicó que «la venta actual está totalmente correlacionada con otros activos de riesgo, pero su magnitud es mayor en las criptomonedas debido a su volatilidad». Esta sensibilidad a los riesgos macroeconómicos se mantendrá elevada mientras la participación institucional no se amplíe más allá de Bitcoin y Ether.
La liquidez del mercado ha disminuido significativamente, con su profundidad cayendo alrededor del 30% desde su máximo anual, lo que provoca movimientos de precios más bruscos, según reporta la firma Kaiko. En este contexto, los operadores de opciones están adoptando estrategias neutrales, como strangles y straddles, para protegerse ante la expectativa de mayor volatilidad.
Los niveles críticos de soporte en el mercado
Con Bitcoin ya en terreno negativo desde la asunción del presidente Donald Trump, y la capitalización total del mercado cripto de vuelta a los niveles que se registraban al inicio del año, no hay mucho soporte técnico hasta la zona de los 90.000 dólares, advierte Augustine Fan, socio de SignalPlus. Se anticipa que el sentimiento inversor podría continuar deprimido en las próximas semanas.
Del récord histórico a la corrección
El vertiginoso retroceso del bitcoin contrasta notablemente con el rally de principios de octubre, cuando superó por primera vez los 125.000 dólares, impulsado por una fuerte demanda global y un creciente interés institucional. Aquel período fue favorecido por una política monetaria más favorable del gobierno de Estados Unidos y una integración más fuerte del criptoecosistema con los mercados financieros tradicionales.
La debilidad del dólar frente a otras monedas también había alimentado el entusiasmo entre los inversores que buscaban diversificar sus carteras en medio de la incertidumbre comercial. Sin embargo, ese impulso se desvaneció, y entre las liquidaciones masivas, la reducción de la liquidez y la incertidumbre en torno a la política monetaria de la Reserva Federal, Bitcoin enfrenta una de sus correcciones más significativas del año.
El ecosistema cripto está a la espera de señales que indiquen si se puede encontrar un piso claro en la zona de los 90.000 dólares, mientras los inversores permanecen cautelosos ante una posible prolongación de esta tendencia bajista. En la actual coyuntura, es esencial para los inversores mantenerse informados y tomar decisiones fundamentadas en un entorno que continúa siendo altamente volátil y complejo.