Llenar el carrito de compras en un supermercado representa un gasto que varía significativamente en función de la provincia en la que se realice la compra. Un informe reciente elaborado por la consultora Analytica ha puesto de manifiesto esta problemática, revelando que existen diferencias regionales que superan los $75,000 en lo que respecta al acceso a productos básicos para la mesa familiar en Argentina.
El estudio se centra en la evolución del costo mensual de una compra típica para una familia de clase media, compuesta por dos adultos y dos menores. Para asegurar la comparabilidad de los datos entre las distintas provincias, se ha mantenido constante tanto la marca como la cantidad de los productos analizados. Según Analytica, la selección de los bienes se fundamenta en las necesidades de consumo básicas y representativas. La metodología contempla el peso de las compras en supermercados, que puede variar de acuerdo con la región.
Las provincias con mayores y menores costos
Los resultados del informe son reveladores. Las provincias donde el costo del carrito de compras ha registrado un incremento más significativo incluyen a Jujuy (3.9%), Catamarca (2.5%) y Corrientes (2.5%). En contraste, Misiones (1%) y Santa Cruz (0.7%) presentaron las menores alzas.
En términos absolutos, a fecha del 27 de junio, las provincias con mayores aumentos fueron:
- Catamarca: $34,000
- Corrientes: $29,927
- Jujuy: $28,213
- La Rioja: $23,139
Por otro lado, las provincias en las que los aumentos fueron más moderados abarcan a las patagónicas como Tierra del Fuego ($8,631), Neuquén ($6,422), Río Negro ($5,404) y Santa Cruz ($4,997).
En este contexto, el carrito más caro se encuentra en Santa Cruz con un costo de $769,319, seguido por otras provincias de la Patagonia como Chubut ($759,467), Tierra del Fuego ($751,937) y Río Negro ($742,188). En el extremo opuesto, Formosa destaca como la provincia más asequible, con un costo de $693,746, seguida por Chaco y Misiones, con costos de $693,219 y $691,579, respectivamente.
La diferencia de precios entre Santa Cruz y Misiones es notable, superando los $75,000, lo cual evidencia una disparidad considerable en el acceso a la misma variedad de productos en distintas partes del país.
Causas de las variaciones en precios
Desde Analytica, se ha señalado que las variaciones en precios están asociadas a aspectos logísticos y laborales. Claudio Caprarulo, director de la consultora, afirmó que parte de los costos más altos se reflejan en la Patagonia, donde la carga impositiva también juega un papel crucial, variando de una provincia a otra. Además, es importante considerar que en algunas regiones, el consumo de productos en supermercados es más representativo, lo que influye en el coste final.
Productos con mayores y menores aumentos de precio
Los datos del informe también permiten observar variaciones significativas en los precios de productos específicos. El pan lactal ha registrado algunos de los mayores aumentos en casi todas las provincias, con incrementos superiores al 5%. Sin embargo, en provincias como Catamarca y La Rioja, el aumento fue más contenido, alcanzando solo el 2.5%.
El coste del azúcar también ha experimentado alzas, con incrementos que oscilan entre 3% y 5% en casi todas las provincias, salvo en Córdoba (1.3%) y San Luis (1.6%).
Otro producto que ha visto un aumento es el café instantáneo, que ha registrado incrementos entre 2% y 3% en la mayoría de las provincias, a excepción de algunas regiones patagónicas donde las subas fueron más bajas.
Sin embargo, no todos los productos han intensificado sus precios; por ejemplo, la lata de choclo ha presentado reducciones significativas en varias provincias, con los cambios más destacados en Chaco (-5.5%), San Juan (-4.3%) y Formosa (-3.4%).
El caso del dulce de leche es igualmente revelador. Este producto ha mostrado reducciones en precios en varias regiones, en especial en CABA (-4.5%) y Chaco (-4.4%), aunque en algunas provincias como Córdoba y Tucumán, se han registrado ligeros incrementos.
Reflexiones sobre el acceso a productos básicos
Estas cifras y análisis no solo reflejan una cuestión económica, sino también social. Las diferencias de precios entre provincias resaltan la necesidad de abordar el acceso a los productos básicos, situación que afecta directamente el bienestar de las familias argentinas. La constatación de que llenar el carrito de compras puede costar más de $75,000 de diferencia según la región es un llamado a la atención sobre la disparidad en la calidad de vida entre los diferentes sectores del país.
La comprensión de estos datos es clave para identificar las áreas que requieren atención urgente y el diseño de políticas que busquen equilibrar el acceso a los alimentos y productos necesarios para la alimentación cotidiana. En un contexto donde la inflación y los costos de vida continúan siendo un desafío, la transparencia y la sensibilidad en cuanto a estas estadísticas son vitales para fomentar un futuro más equitativo.